Continuamos con la serie “Aprendiendo Juntos” dónde nos centramos en los trastornos específicos del desarrollo de habilidades escolares. Nos centramos en sugerir aspectos importantes que considerar para su detección, qué tan presente está en los alumnos mexicanos y también estrategias creativas que se pueden utilizar para contrarrestar efectos negativos de dicho trastorno visto desde diferentes perspectivas.
Acompáñanos y logremos ¡APRENDER JUNTOS!
Definiendo la discalculia
La discalculia es un trastorno del aprendizaje relacionado con la dificultad en el desarrollo de habilidades numéricas como entender cantidades, identificar números, cual es mayor o menor, cual va primero y cual le sigue al igual que dificultades con operaciones aritméticas básicas como sumas, restas, divisiones o multiplicaciones. Si bien esta condición no ha sido investigada tan profundamente como la dislexia, se puede estimar que en México alrededor del 3 al 7% de los alumnos presentan dificultades relacionadas con la discalculia.
Detección a tiempo
La discalculia existe y seguirá existiendo en el aula de clases, el mejor aliado siempre será la detección a tiempo de estas capacidades únicas entre el alumnado. Es seguro decir que la detección de la discalculia es más complicada debido a que hay que asegurarse profesionalmente si en realidad se trata de un trastorno específico relacionado con las capacidades cerebrales de comprender las matemáticas o más bien es alguna otra dificultad relacionada a otra causa. Normalmente, los signos marcados de discalculia se presentan a partir del segundo grado de primaria, donde se introducen por primera vez las operaciones aritméticas, algunas dificultades a las que hay que estar atentos pueden ser:
Discalculia Léxica: Una dificultad para leer símbolos matemáticos, ecuaciones e, incluso, números. Aunque el alumno sea capaz de realizar las operaciones, no le es posible leerlas.
Discalculia Operacional: Una dificultad para llevar a cabo operaciones y cálculos escrita o verbalmente. Aunque pueda entender los números y sus relaciones le costará el proceso asociado al cálculo.
Discalculia Verbal: Una dificultad relacionada con enumerar cantidades, símbolos y operaciones verbalmente. Esto implica también para entender cantidades enumeradas por alguien más.
Discalculia Practognóstica: se refiere a la dificultad para comprender conceptos abstractos. Las personas con esta condición pueden entender los conceptos matemáticos, pero enfrentan problemas al aplicarlos prácticamente, como al comparar operaciones matemáticas o al descomponer números.
Discalculia gráfica: se manifiesta cuando un niño presenta dificultades para escribir símbolos matemáticos, números y realizar operaciones, a pesar de comprenderlas.
Discalculia ideo-diagnóstica: se caracteriza porque el niño no puede realizar operaciones mentales sin recurrir a los números (o contar con los dedos). Además, tiene dificultades para retener conceptos matemáticos que ya ha aprendido.
Estrategias creativas para facilitar el aprendizaje a alumnos con discalculia
Una vez que el alumnado con indicios de dislexia ha sido identificado, es fundamental llevar a cabo acciones especiales para garantizar el aprendizaje de todos los alumnos de forma equitativa. Algunas estrategias a llevar a cabo son:
Cuando se ha identificado profesionalmente este trastorno en niños
Capacitación docente Los docentes deben entender que cada alumno tendrá su propio ritmo de aprendizaje, lo temas matemáticos deberán verse desde una perspectiva global. Es esencial transitar de lo concreto a lo abstracto y de la experimentación a la numeración y operaciones matemáticas. Es crucial mantener este orden y avanzar gradualmente.
Inclusión de los alumnos en el aula Es FUNDAMENTAL NO separar al alumno de su propia aula escolar. Excluirlos del salón de clases tendrá repercusiones negativas para su aprendizaje y potenciara la estigmatización de la discalcuia. Contribuir en el aula con toda la práctica posible, además de promover el aprendizaje colaborativo.
Trabajo con los padres Los padres de familia tendrán un gran papel en cuanto al seguimiento del problema. Además, son los padres de familia los responsables de demandar un trato equitativo para los alumnos. Como padres de familia, es posible aportar de manera constructiva reforzando habilidades como la memoria, incentivar a utilizar el ábaco, apoyar con ejemplos visuales y/o manipulables para asociar cantidades numéricas.
Aprendizaje multisensorial Esta estrategia propone utilizar actividades manuales, físicas o audiovisuales para incluir a todo el alumnado en la absorción de conocimientos matemáticos. Se recomiendan actividades didácticas, interactivas y gamificadas para que todos los alumnos sean capaces de retener los aprendizajes sin importar sus dificultades específicas. Puedes ver un ejemplo en el siguiente video:
Te invitamos a mantenerte al tanto de nuestras publicaciones en esta serie de artículos. La siguiente semana abordaremos el déficit de atención y nombraremos algunas estrategias para contrarrestar sus efectos negativos.